El camino recorre la historia del Cura Jose Gabriel, su nacimiento, infancia, juventud, formación académica, religiosa y obra pastoral y social.
Se realizó la presentación del Camino de Brochero, un sendero espiritual que unirá el paraje de Carreta Quemada, cercano a Villa Santa Rosa de Río Primero, pasando por la ciudad de Córdoba hasta la localidad de Villa Cura Brochero.
Abarca una distancia aproximada de 240 km, no solo es un camino de fe, al mismo tiempo un motor de la economía regional.
Profesionales de la Agencia Córdoba Turismo (ACT), de municipios involucrados, de la Secretaría de Integración Regional, con el apoyo del Arzobispado de Córdoba y el Obispado de Cruz del Eje, han trabajado sobre 15 circuitos en torno a la vida del Cura Gaucho.
El Camino de Brochero busca alimentarse de las experiencias que propone el de Santiago de Compostela, en España.
Por tal razón, se han establecido lazos con este trazado del viejo mundo, que tiene una distancia de 1500 km y presenta 10 caminos diferentes que llevan al yacimiento del Apóstol.
El santo cordobés no ha dejado de acompañar este proceso, pareciera que sigue haciendo de las suyas para que nos conectemos y descubramos su obra.
Trazando caminos, conociendo la obra del Cura Gaucho
Si hay algo por lo que Brochero bregó (lucho) es la creación de caminos, el objetivo poder conectar la ciudad capital con traslasierras.
Hacia 1869 fue designado cura del curato de San Alberto, hoy conocido como Valle de Traslasierras, con una extensión de 4336 kilómetros cuadrados.
Una zona incomunicada por estar posterior a las sierras grandes, no existían caminos, por tal motivo, aislada de sitios más civilizados.
Cruzar ese macizo de 2200 de altura era toda una travesía, el periplo tenía una duración de 3 días a lomo de burro y así poder asistir las carencias básicas de la zona.
A partir de ahí, su objetivo estuvo puesto en la creación de caminos, algo que se concretó tras su muerte, en 1914, con el camino de Copina, los puentes colgantes.
Así mismo, su esfuerzo y pujanza quedaron plasmados con la creación de diques, una estafeta postal y un telégrafo.
La educación fue una necesidad a tener en cuenta, para ello contó con la ayuda de la Madre Catalina de María Rodríguez, quien se hizo cargo del Colegio de Niñas y de la Casa de Ejercicios de Villa del Tránsito.
La conectividad fue necesaria, para nuestro santo, una de las prioridades y hoy lo sigue siendo para los que continúan su obra.
Turismo religioso y economía regional
Estas manifestaciones religiosas, convocantes, generan oportunidades de negocios, fuentes de ingreso y empleo para la región.
La propuesta, anunciada por el gobierno, de llevar adelante un circuito similar al Camino de Santiago de Compostela, pone en evidencia el lado comercial de esta aventura espiritual.
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Camino de Santiago, una experiencia que te descubre a ti.
Es el más antiguo de Europa, son 1200 años de historia, y son variadas las formas de realizarlo, tramos largos o cortos, con mayor o menor dificultad, con diversidad de paisajes, y senderos solitarios.
A lo largo de toda esa experiencia, en total son más de 1000 km, existe una red de servicios, entre ellos, albergues, restaurantes, museos, transportes de mochilas, cubriendo así la necesidad del visitante.
De esta manera, junto con Roma y Jerusalén, es el fenómeno de las peregrinaciones, será el objetivo final de nuestro trazado?
El camino postulado en Córdoba, unirá el paraje de Carreta Quemada con Villa Cura Brochero, serían un total de 15 circuitos que conformarían a uno integrador.
Contar con este atractivo permitiría, por un lado, captar peregrinos no solo devotos del curita gaucho, a lo largo de todo el año.
Es así que el turismo religioso se ha convertido en un motor de desarrollo económico de las ciudades receptoras de viajeros a sitios religioso.
Esta mirada comercial ubica al turismo en un intercambio de servicios, generando ganancias económicas para el lugareño y satisfacción para el peregrino.
La obra realizada por el santo cordobés, hacia fines del siglo XIX, tiene mucho de abrir senderos, de dar a conocer realidades de los pueblos.